Clematis, del griego klematís que significa "pequeño sarmiento" y éste a su vez de las palabras griegas klema "vid" y atos "madera flexible", en alusión al porte y comportamiento de la planta. El epíteto vitalba del latín vitis "vid" y alba, -us, -um "blanco", por lo tanto "planta de vid blanca", en alusión probablemente al color de las flores.
Región mediterránea, S, W y Centro de Europa. Dispersa por toda la Península, aunque es más frecuente en la mitad Norte.
Es un arbusto trepador caracterizado por una corteza que se desprende a tiras y que se reconoce por sus hojas compuestas por folíolos más o menos recortados con los que se sujeta a otras plantas, y por sus flores blancas que en otoño darán unos frutos con un largo apéndice plumoso que les ayudan a ser dispersados por el viento.
Esta planta puede producir dermatitis de contacto ya que sus hojas son urticantes.
Su empleo por vía interna es peligroso y su utilización por vía tópica nada recomendable, por lo que se debe desaconsejar su uso doméstico.
Crece en bosques húmedos, riberas, torrentes y sotos, siempre en lugares donde la temperatura no se eleve en exceso. Su forma de crecimiento recuerda a una cuerda larga que ascendiera enredándose en las ramas de los árboles más altos. Las hojas nacen opuestas y son de recia consistencia, semejantes en forma a las del laurel, si bien sus dimensiones son más reducidas.
Cada una de ellas está constituida por cinco hojuelas de forma ovalada. Al llegar el invierno se produce la pérdida de las hojas.
Las flores se localizan en la copa de los árboles; son blancas y se disponen en forma de ramilletes que nacen de las axilas de las hojas. De cada flor nacen después de la fecundación varios frutos secos de forma semejante a la de la lenteja.
- Reino: Plantae
- División: Magnoliophyta
- Clase: Magnoliopsida
- Orden: Ranunculales
- Familia: Ranunculaceae
- Subfamilia: Ranunculoideae
- Tribu: Anemoneae
- Género: Clematis
- Especie: C. vitalba
Planta trepadora de hasta 5 m de altura, de tallos leñosos al menos en la parte baja cuya corteza se desprende en tiras, sarmentosos, macizos, ligeramente pilosos; ramas pubescentes muy angulosas y con flores blancas en cimas con forma de panícula.
Cuando está en plena floración llega a tapar o eclipsar al huésped sobre el que se asienta, siendo entonces fácilmente reconocible, y entre otros lugares en general menos transitados, se puede observar sobre muchas zarzas y matorrales.
Dado su poder vesicante, era utilizada por los mendigos para producirse ulceraciones de la piel, estimulando de esta manera la piedad de los viandantes, por lo que la planta era conocida tambien como hierba de los pordioseros.
Florece a mitad de la estación cálida (julio y agosto en el hemisferio norte).
Precaución: ¡Tóxica!
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